Una caminata por la Loma Stella Maris entre película y película.
" Hasta el próximo 25 de noviembre se continúa desarrollando el 27° Festival Internacional de Cine, en la Ciudad de Mar del Plata, a 404 km de la Ciudad de Buenos Aires. La movida cultural no termina en el festival. La ciudad tiene múltiples opciones para conocer fuera del circuito de playas. Una buena excusa entre película y película es realizar una caminta a la Loma Stella Maris, que es el punto panorámico más alto de la ciudad a 41 metros sobre el nivel del mar. Museos y vistas desde la altura son los protagonistas. "
Sin lugar a dudas el destacado por estos días en Mar del Plata es el 27° festival Internacional de Cine. Con un programa de actividades y la presencia de figuras de trayectoria internacional, es el gran convocante de público. Es por esto, que una buena excusa para completar la mirada cultural de la ciudad es realizar visitas por fuera del circuito de playa. La Loma Stella Maris, uno de los puntos panorámicos de la ciudad más destacado por ser precisamente el más alto, es una buena opción para completar una mirada distinta a la ciudad, y también desde lo alto.
Partiendo desde el emblemático Torreón del Monje, sobre la Playa Las Toscas, basta tomar la calle Alvear para observar el contraste de la arquitectura moderna y de principios de siglo XX, imponentes chalets, tales como Villa Unzué de Casares (Olavarría 2134), el chateau Frontenac (Alvear 2010), Villa Blaquier (Alvear 2132) y la Villa Ortiz Basualdo (Av.Colón 1189). esta última, construida en 1909 es uno de los mayores exponentes de la arquitectura pintorequista inglesa. Acutalmente es el Museo Municipal de Arte Juan Carlos Castagnino.
El edificio fue la residencia veraniega de la familia Ortiz Basualdo y es propiedad municipal desde 1980, cuando se trasladó a esa sede el Museo de Arte de Mar del Plata.
La casona posee cuatro plantas, una capilla, sala de lectura, sala de música. Se conservan los muebles originales de estilo Art-Nouveau, fabricados por la firma Serruier-Bovy, de Bélgica. Se destaca la sala Castagnino con pinturas, dibujos y fotografías del pintor marplatense. Además de obras de artistas argentinos de estas disciplinas.
otros estilos representados son el neogótico (escalera de acceso al primer piso y oratorio) y el francés ( sala de música). Se pueden observar, además, la recepción y sala de lectura, los comedores principales y de niños, el office de mozos, el balcón de músicos, los dormitorios, el ascensor y baños.
Realiza muestras temporales de la propia colección y de otras instituciones, de artistas de todo el país y especialmente de aquellos creadores de la ciudad. Anualmente organiza el Salón Municipal de Artes Plásticas, cuyas obras premiadas pasan a integrar su acervo.
En Av. Colón 1114, el Museo del Mar es sede de una impresionante colección de 30.000 caracoles de todos los mares del mundo. El museo cuenta con un mirador, biblioteca del mar, auditórium y restaurante-café.
A una cuadra, en Viamonte y Brown, la Capilla de Stella Maris (1908), de estilo neogótico, se destaca por sus exquisitos detalles de ornamentación: el altar de nogal tallado, la torre coronada por una cruz de bronce dorado y el carillón de gran tamaño que reproduce las características de la Abadía de Westminster. La advocación de Nuestra Señora Stella maris, la Estrella de los Mares, da nombre a la capilla y a toda la zona.
Otro de los atractivos de la Loma Stella Maris, y el más curioso, es la Torre Tanque en Falucho y Paunero. La torre de 194 escalones tiene un magnífico mirador terraza desde donde se pueden obtener excelentes fotografías de la ciudad. Es de estilo pintorequista con reminiscencias mediavales. Pertenece a Obras Sanitarias y provee de agua corriente, tomadas de napas surgientes de la cercanía de Camet, a barrios aledaños, siendo la mayor reserva de agua de la ciudad. El tanque de agua superior tiene forma de anillo y a través de su centro se desplaza un ascensor que lleva al mirador. En Falucho 993, con entrada libre y gratuita.
Si uno quiere extender la escapadita cultural, no puede faltar la visita a Villa Victoria. La casa veraniega de Victoria Ocampo de la cual hemos hablado en este blog anteriormente. Pero sin lugar a dudas, y antes de continuar con la programación del festival de cine, la hora del té es una buena excusa para realizar una parada. La cita es en la calle Güemes. A lo largo de 7 cuadras tienen lugar las mejores tiendas de ropas y una tentadora oferta gastronómica con casas de té y una variada carta de salados y dulces.
Un programa a medida, una mirada distinta de una ciudad costera que nos llena con cultura en sus museos, con excelentes vistas panorámicas y como no podía faltar, con una excelente gastronomía y tiendas para efectuar compras. A disfrutarla.
Por Leonardo Celano
Fotos: Archivo Opciones Turísticas.
Fuente: www.turismonardelplata.gov.ar
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